Venecia, 21 de septiembre de 2021- A un paso de Riva degli Schiavoni, por el lado de la iglesia de San Zaccaria, de la que toma su nombre, se encuentra un edificio que perteneció a la Orden Benedictina, y que se convirtió, en 1867, después de la anexión de Veneto al Reino de Italia, en la sede del Cuartel general provincial de los guardias civiles de Venecia (Carabinieri). Nos encontramos en el sestiere de Castello, en un lugar de inigualable valor histórico y artístico, del que hay evidencia ya en el testamento de Doge Giustiniano Partecipazio de 829, que el sábado 25 de septiembre, se abrirá al público con motivo de 1600 años de Venecia, para dar a los ciudadanos la oportunidad de visitar un lugar de extraordinaria importancia para la historia de Venecia y para la Orden de la Guardia Civil.
“Queriamos dar esta oportunidad a todos los venecianos”, afirma el Coronel Mosè De Luchi, Comandante del Cuartel general provincial de los Carabinieri de Venecia, para mostrar un lugar de encanto único, que se remonta incluso antes del año mil, haciendo que los ciudadanos puedan comprender la historia del lugar sino también la importancia de ese trabajo, en una ciudad tan particular como Venecia”.
Al ingresar nos encontramos en el claustro que remonta al 1495, un lugar que todavía tiene las marcas de un pasado hecho de historias y leyendas que, los Carabinieri de San Zaccaria, decidieron de hacer descubrir al público en el año del 1600 aniversario desde la fundación de la ciudad. Justo aquí, en este claustro, se exhiben algunos de los uniformes históricos que van desde 1840 hasta hoy en día, y que recuerdan la historia de esta antigua y fundamental profesión que se encarga de la seguridad de la ciudad. Entre los uniformes también hay dos particularmente especiales, el usado en la película “Il Giorno della Civetta”, protagonizada por el popularísimo actor Franco Nero, y otro más deportivo, que perteneció al esquiador de los años ’70, Pietro Gros.
“El puesto de mando de San Zaccaria tiene un vínculo estrecho con la historia de Venecia y el Doge”, continua el Coronel De Luchi- se dice, de hecho, que cada domingo o lunes de Pascua, el Jefe de Estado de la Serenissima iba aquí para asistir a la misa y, en este lugar, parece que recibió como don el “corno ducale”, de la abadesa del convento. Es un vínculo que hunde sus raíces en la concesión por la abadesa del suelo donde hoy se encuentra la Basilica de San Marco”.
El antiguo convento benedectino de San Zaccaria, después de la llegada de Napoleon en 1810, fue suprimido, asi como muchas de las órdenes conventuales venecianas convirtiéndose, durante el periodo Austro-Hungaro, en sede de la contabilidad del Imperio y, más tarde, en sede de los guardias civiles y del Ejercito Real, hasta la Primera Guerra Mundial.
Además de su larga tradición y belleza arquitectónica, el actual Cuartel general provincial de los guardias civiles de Venecia, encierra leyendas relacionadas con el fantasma de la abadesa, quien aún hoy se dice pasear por la noche en el claustro del antiguo convento benedectino. El Coracero Biasin, además, dijo que precisamente en este lugar hubo un enfrentamiento entre las tropas alemanas y los Carabinieri, los cuales fueron capaces de asegurar el cuartel general.
Las visitas guiadas son gratuitas y organizadas por los Carabinieri de Venecia, con el soporte de Touring Club.
Para mayor información y reservar: provveeventi@carabinieri.it o 0412741513.