Venecia, 31 de agosto - Domingo, 5 de septiembre, regresa la Regata Histórica de Venecia, uno de los eventos más antiguos que tienen lugar en la ciudad y que este año toma una importancia especial en ocasión de las celebraciones de los 1600 años de Venecia. Una competición entre los pescadores de la laguna que tenía, de hecho, lugar diariamente cuando, después de una noche de trabajo, intentaban llegar primeros, con su barcos diseñados para la característica “voga alla veneta”, con los remeros que miraban hacia la proa, en el mercado de Rialto, con el objetivo de ganar los precios más altos para su pescado.
Noticias de regatas especialmente organizadas para celebrar fiestas religiosas o eventos importantes, se tienen a partir de la segunda mitad del siglo XIII.
La primera evidencia escrita de esta competicion entre barcos de remos, tipicos de la laguna de Venecia, se remonta al 1274, en la que se dice “Splendor magnificissime Urbis Venetorum, die 16 septembris...indicta regatta cum navigiis habentibus remos viginti". Entonces, ya en el siglo XIII la República Serenissima sostenia y promovia eventos deportivos de este tipo, en los que se celebraba el poder y las habilidades de los marineros venecianos.
Es en 1315 que el Senado tomó la decisión de regular el desarrollo de la competición, vinculando el aspecto deportivo y recreativo a la recurrencia de la “Festa delle Marie”, y así creando un espectáculo único que se convirtió en fuente de orgullo y prestigio para la ciudad, así como evidencia de la supremacía y prosperidad de una de las Repúblicas Marítimas más poderosa e influyente del Mediterraneo.
La notabilisima vista a “vuelo de pájaro” de la ciudad de Venecia, hecha por Jacopo de’ Barbieri en 1500, es el primer testimonio iconográfico de la competición, que luego tuvo lugar en el tramo de la laguna entre el Lido y la Plaza de San Marcos, a bordo de barcos con cuatro remeros.
A pesar de los complicados acontecimientos históricos que Venecia pasó después de la caída de la República veneciana en 1797- la ocupación francesa antes, la austriaca después, pasando por dos guerras mundiales- la Regata Histórica se ha quedado un encuentro a lo que los venecianos nunca han renunciado y que han deseado, y sabido, conservar entre entonces y ahora.
La que se considera como la primera regata “moderna”, sin embargo, se remonta a 1841, aunque disputada con números y colores de barcos diferentes de hoy. Los gastos del evento serán públicos y ya no privados. A partir de este año, de hecho, la competición tomará la forma que todavía tiene: organizada por la ciudad de Venecia, bajo la responsabilidad de las autoridades austriacas y gestionada como una competición celebrada a lo largo del Gran Canal, con el fin de “animar los gondoleros a mantener en honor su afamada habilidad”.
Durante todo el siglo XIX, y en el primer ventenio del siglo XX, la Regata en el Gran Canal sigue sin tener un ritmo fijo, y se organiza con motivo de eventos importantes para la ciudad. Como la de 1856, por ejemplo, organizada para celebrar la visita del emperador de Austria-Hungría Francisco Jose y su esposa Sissi, o la de 1866 para la anexión del Veneto al Reino de Italia. Y después la de 1892, con motivo de la primera edición de la Bienal de Venecia.
Fue en 1899, con motivo de la III Bienal Internacional de Arte, bajo propuesta del alcalde Filippo Grimani, que la Regata tomó la connotación de “Historia”.
Desde 1922, la Regata Histórica se celebra anualmente bajo la supervisión del municipio de Venecia: la única suspensión es la debida a la guerra, entre 1939 y 1946, aunque una edición se celebró en 1942, en medio del conflicto, con motivo de la película “Gran Canal”, con Cesco Baseggio, ambientada a finales del siglo XIX.
Además de la competición tradicional entre los “gondolini”, reservada a los hombres, a lo largo de los años, se han añadido, varias otras competiciones: la de los “Caorline” con seis remos (desde 1951), la de los “Giovanissimi” (Jovencísimos) (desde 1976), y la de las “Donne” (Mujeres) (desde 1977, aunque ya se habían disputados dos competiciones, en 1953 y 1954). En cada competición, después de las clasificatorias que tienen durante todo el año, nueve barcos compiten por las “banderas”: a los primeros clasificados pertenecen las rojas, a los segundos las blancas, a los terceros las verdes y a los cuartos las azules.
Los puntos fundamentales y las etapas clave de las competiciones de los varios tipos de barcos son: el “spagheto” (el cordón), puesto a la salida frente a los jardines de Sant’Elena, el “paleto”, un palo puesto en el centro del Gran Canal frente a la estación de tren de Santa Lucia, donde- asi quiere la tradición- se determinan los ganadores, la “machina”, una construcción flotante que se apoya su un barco atracado en el Canal, en frente de Ca’ Foscari, rico de tallas policromadas y doradas, que es el lugar donde se concluyen las competiciones y para la entrega de los premios, que consisten en dinero y banderas.
Característica del dia es la histórica procesión de inauguración, organizada después de la Segunda Guerra Mundial, para conmemorar la llegada de Caterina Cornaro a Venecia, Reina de Chipre, que voluntariamente renunció a su trono en favor de la República de Venecia en 1489, determinando su anexión oficial a la Serenissima. La procesión consiste en un desfile de docenas de barcos típicos del siglo XVI, de varios colores y con a bordo gondoleros en traje, que traen el Duce, la Dogaressa Caterina Cornaro, y todas las autoridades más altas de Venecia, una fiel recreación del glorioso pasado de una de las Repúblicas Marítimas más poderosas y influentes del Mediterraneo.