Venecia, 21 de octubre de 2021- Era el 14 de septiembre de 1423, el dia de la Santa Cruz, cuando los primeros barcos venecianos desembarcaron en Salónica. Ya que Bizancio era incapaz de defenderse, los tesalonicenses aceptaron voluntariamente la autoridad de la Serenísima, puesto que la amenaza otomana ya era más que visible. Sin embargo, las armas venecianas fueron insuficientes delante del sultán Murad II, quien, después de un épico asedio de tres días, ocupó la ciudad el 29 de marzo de 1430.
La presencia de lo venecianos se prolongó durante sólo siete años, pero, su impacto en el corazón de la Grecia septentrional, que es decir Salónica, fue significativo porque, incluso después de la conquista otomana, los contactos entre las dos ciudades fueron continuos e intensos, en términos económicos, educativos y sociales. Estos contactos constituyen el centro de la exposición “Salónica- Venecia. Huellas de personas, caminos de la historia” (Salonicco- Venezia. Tracce di persone, strade della storia), organizada por la municipalidad de Tesalónica y el “Instituto Ellenico di Studi Bizantini e Postbizantini” de Venecia, con motivo del 1600 aniversario del nacimiento de Venecia. Los individuos que viajaban entre las dos ciudades, durante cuatro siglos, trajeron consigo su patrimonio cultural, colaboraron, crearon familias mezcladas, y se expandieron hacia la costa adriática opuesta. Siguiendo las huellas de estas personas se traza el camino de la historia compartida entre Salónica y Venecia, se conocen la riqueza, la profundidad y los lazos que se han desarrollado entre las dos ciudades.
La documentación histórica se basa principalmente en material inédito del archivo del “Instituto Ellenico di Studi Bizantini e Postbizantini di Venezia” y del “Archivio di Stato di Venezia”. En la exhibición hay documentos que van a poner en evidencia la presencia de los tesalonicenses en Venecia (registros de nacimientos, matrimonio y muerte), pero también su participación en la comunidad griega. La exposición también presenta un gran número de documentos que atestiguan la intensa actividad comercial entre Salónica y Venecia, del siglo XVI al XIX. Salónica, una vez bajo la soberanía de Venecia, y después su siguiente desarrollo, se convirtió de hecho en uno de los principales interlocutores comerciales de la Serenissima. Muchos tesalonicenses, griegos y judios, se establecieron en Venecia para ampliar su actividades comerciales desarrollando una importante comunidad griega, que dejó testimonio y tesoros en la ciudad del Doge. A partir de los contactos comerciales, se presentan documentos relacionados a los órdenes de mercancías, a la distribución de materiales, rutas de navegación y, en general, la actividad de los tesalonicenses durante su viajes de Oeste a Este, y viceversa. En el centro de la exposición también hay el “Collegio Francini”, poderoso polo de atracción para los jóvenes tesalonicenses que estudiaron en Venecia. El material expuesto da testimonio de la presencia educativa e intelectual de la comunidad greco-ortodoxa en Venecia, a través de documentos procedentes de los archivos estudiantiles, como por ejemplo certificados de enfermedad y vacunas.
La exposición, que tiene lugar en el centro histórico de Salónica, estará abierta hasta el 31 de diciembre y luego se detendrá en Venecia.